¿Qué es el estilo?
Hablar de «estilo» dentro de la producción de imágenes, nos lleva a estructurarlo en una red de nodos naturales al ser humano, estos dan soporte y vínculo a la construcción de la subjetividad del llámese ilustrador, fotógrafo, diseñador, etc.
Estos nodos tienen que ver con el desarrollo biológico, social; su formación cultural y el contexto histórico del sujeto, estas partes crecen en sí mismas y de manera tangencial al resto. La construcción de esta subjetividad va puliendo su potencial para lograr canalizar, expresar y hacer tangibles sus ideas.
Ejemplo:
El ilustrador coreano Moonassi[1] elabora su trabajo a partir de la influencia que tuvieron sus estudios en pintura asiática tradicional, para forjar una reinterpretación basada en sus análisis y reflexiones personales, esto crea un estilo discursivo que se empalma con la técnica y estética que ha ido desarrollando durante su vida.
Conforme un productor de imágenes madura y desarrolla la conciencia de las capacidades de cada uno de estos nodos en su persona, de igual manera que un paladar se afina al tacto de los sabores conforme más aprende sobre el consumo y elaboración de los alimentos, nuestro sujeto podrá afinar su sensibilidad visual conforme fortalezca su estudio y producción de imágenes, y por ende podrá construir un estilo que exprese su manera de configurar el mundo.